El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, no suele recibir elogios precisamente si transita por lugares públicos, pero se llevó una alegría en la noche del martes en el Hotel Intercontinental de Madrid. La discreta pero activa desde hace 30 años Fundación Independiente, le entregó una placa «por la defensa de la dignidad del Estado» tras tomar -por fin- el control de las cuentas de la Generalitat en una de las claves para desmontar el procés. «Por fin voy a poder llegar a casa una noche y decir a mi mujer que me quieren en algún sitio», bromeó el ministro a puerta cerrada ante un centenar de asistentes. La Fundación Independiente, que preside Aldo Olcese, entregó también galardones al independiente presidente de la Comisión Nacional de Competencia, José María Marín y a, título póstumo, al fallecido fiscal del Estado, José Manuel Maza.
-Extraído del Periódico El Mundo, domingo 17 de diciembre-
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