«Hay que acabar con la fractura social en Cataluña que nos ha dividido en dos porque el problema de Cataluña no es político es sociológico»
- El presidente de SCC destacó la importancia de la comunicación en un escenario en el que se compite en propaganda y en información
Madrid, 27 de septiembre de 2018.- El presidente de Societat Civil Catalana, José Rosiñol, fue el invitado de la Fundación Independiente en la Tribuna que tuvo lugar el miércoles 26 de septiembre en el Club Financiero Génova. Fue presentado por el presidente de la Fundación Independiente Aldo Olcese, quien destacó su compromiso con Cataluña.
José Rosiñol comenzó su intervención presentándose y afirmando que él no era político, que no militaba en ningún partido y no sabía si lo que hacía era política.
Para contextualizar el origen de Societat Civil Catalana, explicó que SCC nació en una pequeña reunión de unos pocos catalanes preocupados por la situación en Cataluña. Mariano Ganduxer -de Convergència- reunió a varias personas dl Partido Popular, del PSC y de CiU para hablar de lo que pasaba en Cataluña y el desafío independentista.
Para Rosiñol, el independentismo se mantiene porque tiene en su poder la Generalitat de Cataluña con 40.000 millones de euros de presupuesto para hacer lo que le de la gana; tiene en su poder a los medios de comunicación públicos, etc. Sin dinero público el independentismo no tiene ninguna viabilidad. Por eso el objetivo de SCC es que las fuerzas no independentistas consigan una mayoría constitucionalista en el Parlament, «da igual el partido que saque más votos».
El objetivo número uno de Societat Civil Catalana es desaparecer porque SCC es un instrumento para neutralizar el desafío independentista y no quiere perdurar en el tiempo. En Cataluña si no eres independentista o eres condenado a la «muerte civil» o eres vilipendiado y por eso es tan importante la comunicación: «La lógica de SCC es comunicar. Nos encontramos en un escenario donde se compite en la propaganda y en la comunicación». La manera de hacerlo es comunicar para la centralidad sociológica catalana, que es mayoría, según el presidente de SCC. «Hay que acabar con la fractura social en Cataluña que nos ha dividido en dos porque el problema de Cataluña no es político es sociológico».
José Rosiñol explicó que a través del Programa 2000 creado por Jordi Pujol se ha conseguido el control de la educación, el control de los medios de comunicación y el control de la sociedad civil. Sin embargo, según su opinión, compartida con Ignacio Buqueras, la gran ventaja es que el independentismo se ha adelantado a los tiempos debido a circunstancias económicas -crisis del 2008-, políticas etc… Inició a su juicio, demasiado pronto – año 2012- su «revolución». Si hubieran esperado un poco más, probablemente en 2025 «estaría todo hecho» porque, además, «el 63% de los jóvenes son votantes independentistas. En diez años serán mayoría política y sociológica».
«Si con manipulación, propaganda, el 155, la resaca del 1-O, las elecciones del 21 de diciembre era el peor escenario para nosotros y solo sacaron un 47% de los votos, todavía hay esperanza. Y lo que vemos ahora es la radicalización de su fracaso, intentando inflamar la calle más allá de sus objetivos políticos», afirmó José Rosiñol. SCC quiere insistir en la convivencia y el respeto entre los catalanes y por eso quiere tomar la iniciativa porque, en el fondo, es un escenario de confrontaciones estratégicas. Según el presidente de SCC, cuando haya zozobra, la centralidad sociológica de Cataluña buscará la estabilidad, que es lo que busca Societat Civil Catalana.
Para terminar su intervención, pidió la ayuda de todos los españoles porque en Cataluña solos no pueden. Para Rosiñol «tenemos la oportunidad de desacomplejarnos como país desde la sociedad civil y desde la política».
A continuación, tuvo lugar un animado coloquio con numerosas intervenciones, preguntas y planteamientos que fueron respondidos por el invitado con claridad y compromiso.
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